Valencia, 17 agosto de 2008
Juan de Salinas
(1559-1643)
El barroco es tan luminoso en poesía que uno siempre siente que su verso es el material -todavía sin superar- al que acudir cada día para nuestro quehacer artístico. Es el manantial inagotable de todas las grandes generaciones de poetas de este país. Leamos atentos a Juan de Salinas y seguro que, sin querer, llegaremos a conmovernos con su poesía sencilla como mucha del 27.
Púsoseme el sol,
salióme la luna;
más quisiera, madre,
ver la noche oscura.
El que yo quería,
madre, no me quiere,
y por mí se muere
el que aborrecía.
Sin mi luz y guía
no quiere otra alguna:
más me vale, madre,
ver la noche oscura.
Pues da tan menguada
luz mi avara suerte,
más quiero la muerte,
que es noche cerrada.
Que viendo acabada
luz tan clara y pura,
más me vale, madre,
ver la noche oscura.
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